Dirigido a la mujer maltratada.

Mujer, si te casaste con el miedo
En lugar de con el Amor,
Sé valiente, sé sincera y...
Acéptalo sin vergüenza, no sientas pudor.

...¿Por qué sino permites que te maltraten?,
¿Por qué sino soportas tanto dolor?
¿Cómo puedes ser compasiva, mujer,
Si ni siquiera por ti sientes compasión?

¿Acaso crees que mereces ser castigada?,
¿Acaso deseas vivir el horror?
¿Por qué prefieres dormir entre cardos,
A cubrir tu colchón con pétalos de flor?

Tal vez pienses que tú no mereces
Paladear de la vida más que un amargo sabor,
Más yo te digo mujer, que tú, como todos,
Mereces de la vida degustar lo mejor.

... Mas la vida, mujer, necesita tu ayuda,
para ofrecerte abundancia de alegría y Amor.
Pues sólo tú, mujer, puedes romper las cadenas
Que te mantienen atada al odio y al rencor.

... No hacia otros, mujer, sino hacia ti misma.
Pues eres tú quien se fustiga con ardor,
Utilizando, eso si, las manos de otro,
Las de aquel al que llamas tu maltratador.

... Pero sus manos, mujer, nada podrían,
Si realmente tú sintieras Amor.
Hacia ti, mujer, no hacia ningún otro,
Pues el Amor, mujer, se extiende desde el interior.

¿Acaso no prefieres mujer maravillosa,
Pintar tu existencia con un nuevo color?
¿Acaso no prefieres dejar de marchitarte,
Y florecer cual rosa con excelso esplendor?

Si te amas, mujer, no permitas que te pegue.
Si le amas, mujer, no permitas que sea un maltratador.
Si realmente amas, mujer, con decirlo no basta.
Si realmente amas, mujer, demuestra tu Amor.

Que en la vida, mujer, hay que mostrar valentía,
Más la valentía no existe sin enemigo ni terror.
Y es bueno saber que todo en la vida
Nos brinda la oportunidad de Ser Superior.

Mujer, yo te Amo y sin embargo te golpeo,
Con palabras duras para tu corazón.
Más mi intención, mujer, no es otra que esta:
¡Que despiertes ya de tu largo sopor!